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El kiosco del Parque Juan XXIII está cerrado desde hace seis meses por el retraso en la adjudicación del contrato

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El PP denuncia la falta de previsión del tripartito que acumula un nuevo contrato caducado que deja sin servicio a vecinos y usuarios medio año.

El kiosco del Parque Juan XXIII lleva seis meses cerrado. El grupo municipal del Partido Popular ha lamentado el retraso en la adjudicación del contrato por parte parte del tripartito que gobierna en San Vicente del Raspeig (PSOE, Compromís y Guanyar), cuya falta de previsión ha provocado que finalice un nuevo contrato municipal sin que haya sido renovado a tiempo.

El grupo popular ha explicado que hace seis meses se dejó de prestar el servicio de kiosco y cafetería a los vecinos y usuarios habituales del Parque Juan XXIII, así como a las decenas de personas que se reúnen en este parque con motivo de actuaciones musicales o eventos festeros. En los últimos meses se ha celebrado, por ejemplo, la Gala Homenaje a la Mujer Festera de las Hogueras y Barracas o el Festival de Bandas, entre otros eventos.

Además de los inconvenientes ocasionados a los ciudadanos, el PP ha lamentado que durante estos seis meses ninguna empresa o autónomo ha podido explotar económicamente este kiosco, sin posibilidad por tanto de crear puestos de trabajo por la tardanza del tripartito en sacar a licitación un servicio que finalizó el pasado mes de enero.

El grupo municipal del PP ha indicado que el contrato de explotación del kiosco situado en el Parque Juan XXIII finalizó en enero de 2017. Sin embargo, hasta abril no se publicó el nuevo pliego de condiciones para que pudieran optar las empresas interesadas. Finalmente, este viernes se ha aprobado en Mesa de Contratación la propuesta de adjudicación del servicio, por lo que aún pasarán varias semanas hasta que el kiosco vuelva a entrar en funcionamiento.

El grupo popular ha lamentado que “desde la llegada del cuatripartito, ahora reconvertido en tripartito, el Ayuntamiento de San Vicente ha tenido cuatro concejales de Contratación diferentes como consecuencia de las peleas internas del equipo de Gobierno y de sus problemas para gestionar el día a día de un municipio que tiene más de 56.000 habitantes”.

En este sentido, el PP ha recordado que el tripartito tiene actualmente cuatro contratos de servicios esenciales para un Ayuntamiento que no han sido renovados a tiempo, y que en total suman alrededor de 4,6 millones de euros. Se trata de los servicios de autobús, mantenimiento y limpieza de parques y jardines, suministro de energía eléctrica y megafonía y sonorización de actos.

A estos cuatro contratos caducados a día de hoy se suman otros que han ido venciendo a lo largo de estos dos años de legislatura hasta sumar casi una decena. Algunos de ellos tan importantes para el funcionamiento de una ciudad como el de mantenimiento del alumbrado público, el servicio de arrastre de la grúa, el de pintura vial, el de los uniformes de la Policía Local o el de mantenimiento de las fuentes.